La estadounidense Annie Schwenker, de 17 años, podría haberse roto la crisma -literalmente- cuando hace dos meses cayó de espaldas cuando se deslizaba por la baranda de las escaleras de un crucero. La joven se encontraba de viaje de con su familia y un grupo de amigas y, milagrosamente, sólo se rompió una costilla. Una de sus amigas grabó con su móvil el espectacular tortazo ahora y, tras pedirle permiso a Annie, lo ha subido a Facebook, donde se ha convertido en viral y suma ya más de 22 millones de visualizaciones.
La joven ha explicado a Buzzfeed que la caída no debió a que hubiera bebido: "Sólo caí porque cometí la estupidez de soltar la mano con la que me agarraba de la barandilla". Annie ha explicado que tras golpear con la barandilla y acabar en el siguiente nivel de las escales se levantó de inmediato, con el labio ensangrentado y repitiendo una y otra vez "estoy bien, estoy bien".