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Una mujer pasó de la talla 24 a la 8 mientras su esposo servía en Afganistan, por eso a su regreso dudó de que fuera la misma mujer.

Cuando Annika y Jamie se enamoraron no sabían lo difíciles que se volverían las cosas para ambos, pues Jamie era soldado del ejército estadounidense y debía ir a servir a Afganistán.

Sin embargo, la pareja procreó a Charlie y a Bobby y a raíz de ello, Annika comenzó a subir mucho de peso.
Ella ya no se sentía conforme con su cuerpo pues llegó a pesar la peligrosa cantidad de 238 libras.
Annika era talla 24 y su Índice de Grasa Corporal estaban en 41, algo peligrosamente alto para una mujer de 5 pies de estatura.
La protagonista de esta historia relata que sentía una gran vergüenza al ser la mamá más gorda cuando llevaba a sus hijos al colegio.
La frustración aumentaba cuando sus pequeños, fanáticos de la natación, querían visitar la piscina y ella no podía acompañarlos, esto debido a lo mal que se sentía luciendo un traje de baño. Annika se refugió en la comida chatarra luego de que su esposo tuviera que partir y estar mucho tiempo sola.

Con cada viaje de Jamie a Afganistán, Annika había aumentado mucho de peso. Él la seguía amando, pero ella no se sentía bien con su cuerpo.
Por el hecho de estar en el ejército, su esposo se mantenía en excelentes condiciones mientras Annika subía cada vez más de peso y decidió hacer un cambio.

Esta mujer de 28 años, pasó de ser una enorme talla 24 a una esbelta talla 9 en sólo siete meses gracias al amor que sentía por su marido y sus hijos.

Fuente: vidayfamilia.univision.com
 
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